Al despertar todo estaba tan oscuro como en su sueño. Se aseguró y el reloj marcaba el mediodía. Sonrió. Encendió la luz. Miró por la ventana. La gente se movía de un lado a otro, llevada sin remedio por la histeria. Bajó a la calle y encontró a los cuatro jinetes amenazando, los pasadizos al infierno abiertos en cada esquina, el fuego ondeando… Una sonrisa se dibujó en su cara al comprender que el ultimátum de encontrarla se cumplía.
3 comentarios:
Nooooooooo! Que no nos encuentren todavía!!!!!! Ja,ja,ja!
O a lo mejor es bueno que nos encuentren, no sé.
A ver si mañana pongo algo en mi blog, que ya por fin le darán el alta a mi sobrino y acabaré de leer SABER PERDER (libro que por ahora recomiendo, y bastante) y me quedará una pizca de tiempo libre!!
Besos, guapa!!!
Sí! Ya me he enganchado a Muchchada Nui por tu culpa! jaja
Besito.
Los miércoles a las 23.30, aproximadamente. Y siempre en www.muchachadanui.es!!
Publicar un comentario