lunes, 23 de junio de 2008

Momentos culminantes

En todas las vidas, hay momentos de esplendor. Hay días inolvidables. A veces un acontecimiento es apoteósico para una sola persona (o dos) y otras para un país entero (o para dos).
El caso es que ganó España. Y le ganó a Italia. Nadie confiaba en que España pudiese ni tan siquiera estar a la altura de Italia. Italia temida, deseada, campeona del mundo, espectacular en su contundencia… Sabía lo que quería, y allí estaba Buffón con su sonrisa de “medio lao”, sabiéndose superior, creyendo que podría hacer lo que quisiera con ese equipo pequeño que se empeñaba en hacer las cosas bien, bonitas, en jugar, en disfrutar el partido, en saborear cada pase, en recordar todo si tenía que volar al día siguiente a casa… España miraba el partido, lo ansiaba… Italia pensaba en la victoria, y descuidó el partido.
No hubo goles en los primeros 120 minutos. Los momentos de tensión sin embargo se sucedieron uno tras otro. Al final: los penalties, el punto máximo de la fiesta. Los dos equipos que afrontan los diez últimos minutos de forma diferente. Casillas con humildad, Buffón con altivez… España e Italia expectantes, nerviosas, con ganas, decididas, igualadas por fin ante la suerte, igualadas por fin ante el destino, igualadas por fin ante Europa. Y ahí, en la intimidad entre el portero y el lanzador, se medía la fuerza psicológica. En esa intimidad se recordaba cada pase certero, cada ocasión de gol, se recordaba sobre todo cada una de las oportunidades que habían hecho posible, para bien o para mal, estar ahí.
A Italia le podía la confianza en la experiencia, a España las ganas por seguir creciendo.


Al final, lo de menos es que España ganase. Lo importante es que demostró que podía ganar a Italia, demostró que también sabe disfrutar de esos momentos, que sabe hacer las cosas tan bien como para pasar a la historia, como para clavar esas horas de éxtasis en la memoria.

Así el España-Italia, fue un acontecimiento inolvidable para dos países… Hoy hablo de momentos grandiosos pero, hoy, no estoy hablando de fútbol.

(Memorable... grandioso, apoteósico, genial... un 8, o más... GRACIAS).

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Demostrarse a uno mismo que SÍ puede conseguirlo es una sensación indescriptible. La autoestima roza el cielo. Besitos, peque y por cierto, enhorabuena.

Anónimo dijo...

No sé realmente de qué se trata, pero me alegro de tu particular ronda de penaltys conseguida. Muy intenso, mu bello tu artículo, Carmen.

Carmen dijo...

Gracias Miguel Ángel, me halaga muchísimo.

Anónimo dijo...

Las METÁFORAS VIVIDAS son una oportunidad para la SINESTESIA, la ALITERACIÓN, los ritmos acelerados...

me voy a aficionar a "tu forma de ver el fútbol" jejeje, esa emoción

(como dice maikel a los poetas les gusta la INTENSIDAD: FÚTBOL-WHISKY-DESAMORES...) NO sé si tengo "aptitudes"

lo q ´sssssí sé es que DISFRUTO MUCHÍSIMO CON VOSOTROS ¡¡ (isleta, risas, qué este verano, hogueras, son...)

brindo por tu 8 y las SORPRE que surgen

Anónimo dijo...

Por cierto, Carmen, te he notado un cierto tonillo, en algunos posts tittarellianos, a "clementista". ¿Puede ser eso posible? Si es así, confiesa, que ofrecen jugosas recompensas por un ejemplar vivo.
PD: debo confesar que yo fui, en una época remota, bilardista, no sé si tu pasión futbolera o tu edad conectan con el tema, porque es muuuuuuyyyy fuerte.

Carmen dijo...

Gracias Silvia, me alegro de tu disfrute! Seguro que seguimos viviendo muchas más cosas...
Qué razón tiene Maikel, los poetas... y no tan poetas eh? Las metáforas vividas... Ahí quedan, estampadas en versos, en líneas, ahí quedan... ahí acaban... genial.

Miguel Ángel, no sé porqué sin conocer la palabra, me ha parecido que bilardista tenía que ver con lo defensivo... he buscado en internet y he encontrado un 'artículo' que relaciona la literatura de Borges y cercanos con Bilardo y Menotti (http://correctores.iespana.es/bilardo.htm). Se te perdona, imagino que todos tenemos esa época jajaja Yo puedo explicar lo de Clemente... y lo de Camacho, que también he dejado dicho algo... Has visto alguna vez los Marcatoons de Marca? Ahí, parodian a todos. Y hay personajes que están geniales hechos, han encontrado perfectamente la característica como Aragonés, Clemente, Camacho, Lopera, Alonso... Bueno, lo que decía en el blog, intentaba hacer un guiño a eso... en plan irónico... pero solo me he enterado yo! jajaja Clemente está dibujado como el típico bilbaíno duro, que quiere un equipo con 10 defensas y un portero, un equipo en el que la jugada principal se llame "patadón, despeje y fuera" jajaja... en fin... Eso, que Clemente ha sido genial, algo para recordar en el fútbol español, un verdadero veto para el "jogo bonito" y si al menos ese juego "a la italiana" nos hubiese hecho ganar algo...

Carmen dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Pues mira qué interesante conexión político-futbolera, Carmen. Efectivamente, el argentino Bilardo es sinónimo de fútbol agreste y malencarado, llegando incluso a arengar a uno de sus futbolistas ante un rival caído: "¡pisalo, boluuudo, pisalo!" Su fútbol es opuesto a la frondosidad bellísima de los planteamientos de Menotti, esos 4-3-3 o 4-3-1-2 con Kempes y el pequeño Ardiles dándole el título a la Argentina de 1978. Pero este mundial estuvo marcado por la polémica del dirigismo desde el gabinete Videla, el feroz fascista que lanzó al mar a casi dos millares de opositores de su régimen brutal. Bilardo se lo reprochaba, años más tarde, así: "¡sí, sí, macanudo, el artista, el intelectual que lee a Borges y cita a Cortázar, el rompepelotas de Menotti que aceptó ganar un Mundial amañado para tener contento al pueblo, la concha de su maaaadre!"
Tal cual. Así es la vida. Contradicción y matices. Teoría y práctica. Bilardo era un burro pero lanzaba verdades como puños. Menotti, el entrenador ilustrado e izquierdista no pudo rechazar la gloria fácil aunque estuviera manchada de sangre.
Clemente, un corderito a su lado.

Carmen dijo...

Vaya... los problemillas de ideologías futboleras que tenemos aquí son de patio de colegio. Interesante el Bilardo vs. Menotti... Quieres decir que ganó el mundial de forma ilegalísima? Cómo es posible?

Anónimo dijo...

Si, sí. Sobornos de la cúpula militar a los árbitros, amenazas... Todo para tener al pueblo medio adormilado mientras eliminaban a la oposición política y medio mundo miraba para otro lado. Así de crudo. A pesar de todo, Argentina tenía un equipazo.
PD: ¡qué maravilla esta del Estdo del Bienestar que procura a la gente de letras poder disfrutar de la épica inventada del fútbol sin tener que sentir vergüenza! Como ya las causas importantes sólo las defienden los mileuristas, pues... En fin, todo esto reventará cuando los ecos de la Eurocopa ganada (que la vamos a ganar) se diluyan y a la huelga de transportistas le sigan otros sectores y otros y otros. Mientras tanto, yo prefiero seguir viviendo el engaño maravilloso de once héroes jóvenes con pantalones cortos... ¡Arriba la roja!

Anónimo dijo...

PU-DI-MOS!